El Colegio Isabel la Católica tiene sus raíces en la misión educativa y espiritual iniciada por el Padre Usera, cuyo legado continúa vivo en cada rincón de nuestra comunidad. Desde su llegada a México en 1949, las Hermanas del Amor de Dios han trabajado con dedicación, superando desafíos y construyendo un proyecto basado en el amor, la fe y el compromiso con la formación integral.
Nos define una vocación educativa centrada en los valores cristianos, el acompañamiento cercano y el respeto por la dignidad de cada persona. Nuestro modelo educativo combina excelencia académica, desarrollo humano y una profunda conexión con la comunidad, fomentando en nuestros estudiantes el deseo de servir y transformar su entorno.
Con más de siete décadas de trayectoria, seguimos siendo un espacio donde el aprendizaje, el amor y la fe se unen para formar líderes responsables, comprometidos y solidarios, preparados para enfrentar los retos del mundo moderno.
Formar integralmente a nuestros estudiantes desde los valores cristianos y el legado del Padre Usera, promoviendo la excelencia académica, el desarrollo humano y la sensibilidad social. Inspirados en el amor de Dios, buscamos educar para la vida, fomentando líderes responsables y comprometidos con la transformación positiva de su entorno.
Ser una comunidad educativa de referencia, reconocida por su compromiso con la formación integral de niños y jóvenes, destacando en calidad académica, valores humanos y espiritualidad. Aspiramos a formar generaciones que, desde el amor y la fe, sean agentes de cambio en un mundo globalizado y en constante transformación.
Amor: Como principio fundamental que guía cada acción, inspirando respeto, cuidado y solidaridad.
Fe: La base de nuestra espiritualidad, fortaleciendo la confianza en Dios y en el prójimo.
Compromiso: Con la educación, el servicio y el desarrollo integral de cada miembro de nuestra comunidad.
Responsabilidad: Promoviendo un sentido de deber hacia uno mismo, los demás y el medio ambiente.
Excelencia: En la enseñanza y el aprendizaje, buscando siempre el crecimiento personal y colectivo.
Solidaridad: Trabajando en conjunto para construir una sociedad más justa y equitativa.